En la hospitalaria Ciudad de Tijuana habitada por compatriotas de todo nuestro país que acoge a todos sus hijos sin discriminación, con especial amor recibe también a la Congregación de Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento. La Madre Ma. Teresa Cancino Aguilar segunda superiora general, era capaz de enviar a las hermanas hasta el fin del mundo por Amor a Jesús Eucaristía. Es así como en una conversación con Monseñor Felipe Torres Hurtado, Vicario General de B.C., en un Congreso Eucarístico en el año 1943 en Veracruz en donde surge la petición de una comunidad Religiosa, “porque Baja California tiene una gran sed de Jesús Eucaristía”.
Después de la insistencia del Sr. Vicario apostólico la congregación accede. Siendo el 19 de Octubre de 1944 cuando llega el primer grupo de hermanas jóvenes y entusiastas a la Ciudad de Tijuana, ubicándolas en la colonia Morelos, presididas por la R. Madre Ventura Fuentes HMSS (q.e.p.d).
Los sacerdotes y comunidad de la colonia las recibieron con gran alegría al saber que se dedicaban plenamente a la Evangelización y Educación de la niñez y juventud. Gracias a Dios, al entusiasmo y confianza inquebrantable en la Divina Providencia, la obra fue creciendo.
Por la ubicación geográfica de esta nueva obra apostólica, la lejanía y lo complicado que era en aquellos tiempos el traslado a esta ciudad, acordaron darle por nombre “’Instituto Peninsular”.
Debido al crecimiento y a las necesidades que fueron surgiendo, se adquirió un predio de mayores dimensiones en la Colonia Juárez, en aquel entonces el plantel de la colonia Morelos fue llamado Instituto Peninsular 1 y el de la Colonia Juárez Instituto Peninsular 2.
Desde sus inicios la expansión del Carisma Eucarístico Mercedario en Tijuana, sigue en marcha.